TRES ASESINOS | KOTARO ISAKA


Reconozco que la novela negra que más disfruto no es de este siglo. Seguramente, la explicación tenga que ver con aquel cliché romántico del “no eres tú, soy yo”. Y un servidor con sus ya cincuenta tacos quizá tenga el gusto un poco rancio.

    Pero por supuesto hay excepciones.

    Como el noir japonés Tres asesinos de Kotaro Isaka.

Tres asesinos, de Kotaro Isaka

Una de las cosas que más disfruto es perderme en la Biblioteca de Sant Adrià y recorrer los estantes de novela. Un poco a lo Indiana Jones, aunque en mi caso sin buscar un arca perdida. Solo paseo hasta que el azar logra que la novela y yo nos encontremos.
    Así me pasó con esta novela.
    La sinopsis ya me pareció distinta a lo habitual, pero, además, me enteré de que el autor había escrito Tren Bala, cuya adaptación al cine me pareció de lo más entretenida.
    También mencionaba un estilo parecido a las historias de Tarantino.
    Y ahí terminó la búsqueda.

EL AUTOR: KOTARO ISAKA

Kotaro Isaka tiene 52 años y de él solo se han traducido dos novelas al español, pero de su tintero han salido más de diez. No son demasiadas, pero lo que sorprende es que el tipo ha sido muy afortunado en cuanto a premios literarios ya que, según dice la Wikipedia, lleva tantos reconocimientos como novelas.
    A juzgar por la que os hablaré hoy, pienso que con razón.
    De él sabemos poco más que se licenció en Derecho y se dedicó a ser ingeniero de sistemas, sea lo que sea esa profesión. Su primera novela fue Lush Life en el año 2000 y su primer premio lo consiguió en 2003, Premio Yoshikawa Eiji para Nuevos Escritores, por su novela Ahiru to Kamo no Koin Rokkā.
    Por lo demás, es un superventas y se le conoció en Occidente por Bullet Train, Tren Bala, de la que el año pasado se estrenó su adaptación cinematográfica protagonizada por Brad Pitt. Un thriller frenético, divertido y muy entretenido.
    Tren Bala se publicó en 2010 con el título original de Maria Beettle y era la secuela de la novela que traemos hoy: Grasshopper, publicada en 2004 y que en España se ha traducido como Tres asesinos.
    Y desde luego, ¡qué tres asesinos!

¿DE QUÉ VA?

A ver si lo puedo explicar… No, creo que antes necesito al menos un chupito para ponerme a tono. Así que disculpadme un momento.
    Vale, ya está.
  Bueno, pues resulta que tenemos a un tipo llamado Suzuki. Un profesor de secundaria bastante majo, pero que pasó por la tragedia de que su amada esposa murió a causa de un atropello. Lo que en un principio parecía un accidente, más tarde descubrió que el conductor se la llevó por delante a posta.
    Enterado de eso, Suzuki querrá su venganza.
   El problema es que ese conductor es el hijo idiota de Terahara, un capo de la mafia japonesa, así que para su justa venganza elabora un plan nada minucioso. En realidad, solo sabe que para llegar a ese tipo deberá abandonar su puesto de profesor y entrar como comercial en una empresa de cosméticos, bajo las órdenes de un hermoso témpano de hielo con tacones rojos llamada Hiyoko.
  Tras un mes en plan “Avon llama a tu puerta” es el momento de iniciar la segunda fase, pero es entonces que tres tipos se interponen en su camino.
    Disculpadme de nuevo… otro chupito.
   Vale, esos tres tipos son la Ballena, la Cigarra y el Empujón. El primero, es orondo y grande como su apodo y su especialidad es conseguir que sus víctimas se suiciden, aunque eso en ocasiones le haga ver fantasmas. El segundo, la Cigarra, es un as de los cuchillos, pero también anda con sus cosas. En concreto, la explotación laboral a la que considera que está sometido.
    El tercero, el Empujón, como su propio apodo indica, se dedica a empujar a sus víctimas justo cuando pasa un coche, un tren, un caballo…
    Y hasta aquí puedo leer…

POR SI ME LO PREGUNTAS TE CUENTO QUE

Cuando algo es importante de verdad la gente lo escuchará, aunque lo digas en voz baja.
Tres asesinos de Kotaro Isaka
Pienso que la verosimilitud en la ficción está muy sobrevalorada. Así que cuando alguien habla de una novela negra y su primer comentario es algo así como que se nota que el autor se ha documentado mucho respecto al proceso de investigación, o que las situaciones son muy realistas o que muestra perfectamente el drama social, yo me pongo a temblar.
  Es algo parecido a cuando al salir del cine, lo primero que se comenta es la maravillosa fotografía o banda sonora.
    En ambos casos, suelo decirme para mis adentros: ¡vaya tostón que debe ser!
    Y es que cuando una historia es atrapante, uno no se fija en eso. Sale del cine o cierra la novela y lo único en que piensa es ¡qué peliculón! O qué novelón.
   Una buena y bien narrada historia soporta cualquier cagada; a una mala y mal narrada historia no la salva ni un trabajo de documentación tipo tesis doctoral.
  Para que una novela me atrape, primero me tiene que sorprender y entretener, tanto monta monta tanto. Tres asesinos consigue ambas cosas: sorprender y entretener.
    Al comentaros el argumento ya os habréis dado cuenta de que sus ingredientes son peculiares y el punto de partida no es para nada realista. Pero eso en absoluto es un defecto. Es más, esa es la intención de Isaka como explica en una entrevista publicada en el blog Crime Fiction en la que muestra sus intenciones narrativas:
Muchos personajes de mis novelas, incluido Tren bala, tienden a ser un poco extraños, como si estuvieran flotando unos centímetros por encima de la realidad. Esto se debe probablemente a que, en la ficción, personalmente quiero conocer a personas misteriosas que no conocería en la vida real. Los creo caso por caso.
  Pues yo también quiero conocer esos personajes y Kotaro Isaka logra sumergirnos en su universo de ficción y mostrarnos una historia de venganza de una manera sorprendente e imaginativa.
  Para ello se sirve de tres narradores que a su vez llevarán adelante las tres subtramas que convergen en la historia principal.
    Por un lado, tenemos a Suzuki, un tipo corriente al que la vida mete en un lío. Por otro, la Ballena. Un tipo que lee y relee Crimen y castigo y que de tanto tratar con la muerte y la desesperanza al final se contamina de ellas. La Cigarra, a golpe de cuchillo, intenta rebelarse contra el destino que parece encadenarlo a un simple engranaje del sistema.
    Hace falta dominar mucho el arte de narrar para que todo esto fluya de manera precisa, consiguiendo que lo increíble sea creíble y que temas como el azar, la violencia, la venganza, la esperanza o la propia razón de nuestra existencia aparezcan de manera natural, sugeridos por la propia acción de los personajes.
   Su estilo es elegante en las descripciones, tanto de personajes como de entornos, un delicioso humor negro y unos diálogos muy trabajados que me recordaron mucho a los que escribe Tarantino en sus películas. Diálogos que de inicio parece que no te llevan a ninguna parte, pero que al final te dan ganas de aplaudir. Y eso es muy de agradecer. Nada hay peor que leer diálogos obvios y ramplones.
    Otro aspecto que destacar es el uso de metáforas y objetos, como el anillo de casado de Suzuki, que sirven para dar continuidad a la historia, a la par de darle un sentido.
    En definitiva, una novela realmente buena cuya acción transcurre en un par de días y todos los capítulos son escenas.
    Muchas de ellas realmente brillantes.

MOMENTOS ESTELARES

Como os decía, cada capítulo es una escena y eso es algo que le da mucho ritmo a la lectura. Además de muchos momentos brillantes.
   Las conversaciones con su esposa que recuerda Suzuki, los diálogos de la Cigarra con su jefe. Las descripciones subjetivas del entorno por el que transitan los personajes, las situaciones disparatadas, en el buen sentido, los giros inesperados...
   Pero para que os hagáis una idea he seleccionado estos tres:

La primera aparición de la Ballena

Este personaje, la Ballena, se nos presenta en mitad de un trabajo, convenciendo a su víctima para que entienda y acepte que la única solución a sus problemas es que se suicide. El autor logra que algo tan increíble tenga toda la lógica.
La primera aparición de la Cigarra

Este personaje es muy gracioso. Letal, pero gracioso. Su primera aparición también nos lo muestra en pleno trabajo. Se acaba de cargar a un chico, a su padre y solo le queda la madre. Por supuesto, esta intenta convencerlo para que la deje viva, pero lo hace con un diálogo que por momentos podría ser el que pudieran tener un par de vecinos.

La cena de Suzuki con la familia de un posible asesino

Desde el primer párrafo el autor usa un símil entre humanos e insectos. En realidad, durante toda la novela juega con esta idea para intentar explicar por qué nuestra especie es tan violenta. Esto aparece en distintas situaciones. Una de ellas es en la que comparte una cena en compañía de la familia de quien sospecha que es un asesino. 
    En un momento dado, uno de los niños le muestra su álbum de pegatinas de insectos. En concreto el cromo de una langosta, y le dice lo siguiente:

TE GUSTARÁ SI…

No suelo hacer demasiado caso a las contraportadas y menos a los comentarios positivos que se recogen en ellas. Solo faltaría que un editor pusiera ahí un aviso de que la novela es mala.
   Pero en este caso, he de reconocer que atina de pleno. En la trasera del libro se dice: “Desenfrenado y elegante a la vez, Tres asesinos es un viaje vertiginoso al inframundo criminal de Tokio, poblado por los mercenarios mejor preparados del mundo; una suerte de tragedia clásica en la que nada sobra, pasada por el filtro del mejor cine de Tarantino o los hermanos Cohen”.
   Así que, si eres fan de Tarantino y los hermanos Cohen, si eres de los que disfruta cuando no intuyes qué va a pasar en la siguiente página, si valoras las tramas con giros que se apartan de lo habitual.
    Esta es tu novela.

Y esto es todo por hoy. Recordad...

Sed muy felices y moderadamente malvados

sobre mi

DAVID RUBIO

Aunque no sea lo mismo que compartir una buena charla acompañada de un café bien negro, te propongo quedar en otros espacios virtuales donde también suelo perpetrar publicaciones. Clica sobre los siguientes iconos o envíame un mail a balasyestrellas@gmail.com.

Comentarios

  1. ¡Hola, David!
    La búsqueda de una novela tiene similitudes con la búsqueda de un amor o cuánto menos de un ligue. Hay un "click" que te dice que te va a gustar. Esos guiños a la escritura de Tarantino, especialmente en los diálogos, son una garantía para que la novela sea exitosa y te atrape como lector. En lo personal también me gustan que diferentes subtramas convergan en la parte final siempre que sea de forma natural. En eso, por ejemplo, Guillermo Arriaga es único aunque habría muchos ejemplos.
    Estupenda y tentadora tu reseña.
    Abrazos.

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    1. Gracias, Miguel. A mí son las tramas que más disfruto, diría que son la fórmula mágica que une relato y novela. La verdad es que esta novela me ha sorprendido muy gratamente y no me extrañaría que tarde o temprano también la adapten al cine como hicieron con Bullet Train protagonizada por Brad Pitt. Un abrazo!

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  2. Nino
    Hola, David:
    (Reedito mi comentario anterior, ante lo sonrojante de mis despistes gráficos)
    Gracias por este ensayo, como todos tus textos es un asesino del aburrimiento.
    Este lunes iré a mi biblioteca pública habitual (los domingos cierra a las 14:00 y ando liado oficiando de cocinillas) e intentaré sacar ésta o cualquier otra novela de Isaka, o cualquier autor japonés (no recuerdo haber leído “noir” escrito por alguien de esa nacionalidad).
    Mis gustos de los años 80, década en la que transcurrió mi paso de la adolescencia a la juventud, han conformado en gran medida mis criterios artísticos. A lo que se une que mi precariedad económica me lleva a convertir la adquisición de un libro, película o disco nuevo en un acto que me censuro. Por suerte tengo una buena biblioteca y una mala memoria, lo que me permite recuperar obras que releo con la curiosidad de una primera vez. Ahora estoy releyendo en cómic la “Liga de la Justicia” de Giffen y DeMatteis (en su edición de Zinco) y en libro “The Grifters” de Jim Thompson.
    Dōmo arigatō, David.

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    1. ¡Hola, Nino! Lo primero es pedirte disculpas por que tu comentario se borrara. Al borrar el primero, misteriosamente se borró el segundo. Afortunadamente pude recuperarlo del mail.
      Veo que coincidimos bastante con los ochenta, así que me parece que somos de la misma quinta, tanto en años como en gustos.
      Y veo que también en cuanto a lecturas. De Thompson no me cansaré de decir que es mi mayor referente como escritor, pero veo que mencionas al grandísimo guionista JM DeMatteis, para mi uno de los mejores. Creo que su etapa de Spiderman fue grandiosa y nos dejó maravillas como El niño que llevas dentro, con el gran Sal Buscema a los dibujos, o La última cacería de Kraven.
      Tampoco compro demasiado en librerías, los precios no son baratos ni mucho menos y digamos que la calidad media tampoco compensa el pago. Así que para descubrir nuevas lecturas también tiro de biblioteca, por relación calidad precio, de mercadillos de libros (donde por 12 euros te puedes hacer con dos Chester Himes, un James M. Cain y otro Ross McDonald) de ocasión y todos los libros que guardo como oro en paño en la estantería. Un abrazo!

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  3. Pues yo soy fan de Tarantino y de los hermanos Cohen, así que...
    De la literatura japonesa solo he leido a Murakami y la verdad es que, a pesar de la originalidad de las tramas de sus novelas (solo he leido dos: Tokio Blues y Baila, baila) su narrativa me ha resultado muy densa y poco entretenida. Pero ya se sabe lo que se dice sobre los gustos.
    En este caso, sin embargo, y tal como comentas, estoy seguro que Tres asesinos, no solo me entretendría sino que además me atraparía. Se agradece tu reseña.
    Un abrazo.

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    1. Gracias, Josep. Si te gusta Tarantino y los Cohen, la novela te va a encantar. Al ver esa referencia en la contraportada comencé a leerla con cierto recelo, pero a las cuatro páginas ya me di cuenta de que en esta ocasión no mentían, ja, ja, ja... Un abrazo!

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  4. Hola, David. Pues yo, la verdad, es que no soy muy fan de Tarantino (¡ay!) y, aunque en principio nunca me habría fijado en esta novela, me has atrapado con lo que cuentas sobre ella. Una trama de esas que te agarran y no te sueltan y muy bien escrita, por lo que dices, así que habrá que darle una oportunidad, jeje. Una reseña fantástica. Me ha encantado leerte. Besos.

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    1. Gracias, Marta. Bueno, eso habrá que arreglarlo, ja, ja, ja... Quizá no es tan violenta ni explícita como las pelis de Tarantino y se mantiene un tono metafórico menos violento, aunque por supuesto la violencia está en la novela. Un abrazo!!

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  5. ¡Hola, David!
    Yo tampoco soy fan de Tarantino y he leido poco de novela negra, negra por así decirlo, más bien me decantaba por el género detectivesco, pero sin dudas que la trama parece muy interesante y si le diste el visto mas que bueno seria un libro a devorar sin temor a desencanto.
    Gracias a tu recomendación leí "La mirada del observador" y no pude parar hasta terminar.
    Dudo que pueda dar con esta en la web, aquí ni pensar encontrarlo en librerías, que de hecho quedan tan pocas que sobran dedos de las manos.
    Un fuerte abrazo y que puedas seguir descubriendo esas joyitas literarias que tanto disfrutas. Grata semana.

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    1. Gracias, Harolina. Ostras! Cómo me alegra lo que comentas sobre La mirada del observador. Que una reseña anime a la lectura de la novela reseñada si duda es lo máximo que puede aspirar. Esta tiene otro tono y atmósfera, que quizá la haga menos apuesta segura para según que gustos, pero me pareció muy sólida y entretenida.
      Ay, las librerías. Mucho me temo que pronto estarán en peligro de extinción, cada vez son menos y cada vez cuentan con un stock más limitado. Ya apenas quedan quioscos de prensa y eso aleja la cultura de la calle. En el municipio donde vivo ya no queda ningún quiosco, así que para comprar cómics o revistas debes ir a Barcelona o Badalona. Si la cultura no se ve, la cultura desaparece. Un abrazo!!

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  6. Pues a pesar de mi pereza prejuiciosa con lo japonés, los Cohen y Tarantino son los autores de dos de mis películas preferidas: Muerte entre las flores y Pulp fiction. Y lo que cuentas de esta novela me gusta mucho.
    Yo también creo que a la ficción se le exige una verosimilitud que no tiene la realidad. Imagino que es porque la realidad no tiene que demostrar nada. Y también valoro por encima de todo una buena historia bien contada. Lo de la música y la fotografía suman, pero cuando solo hay eso yo le llamo mucho ruido y pocas nueces. Eso en cine. La literatura tiene menos donde esconderse. Ahí, si no hay nueces tampoco puede haber ruido y todo es más evidente. O hay una buena historia y se cuenta bien o poco ruido puede disimular esa falta.
    Un beso.

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    1. Gracias, Rosa. Pues esas dos películas también se encuentran en mi lista de diez películas que me llevaría a una isla desierta, ja, ja, ja... Como curiosidad, esta novela la leí después de esa otra que te comenté por mail. Sin duda, logró quitarme el mal sabor de boca y congraciarme un tanto con la novela negra de este siglo. Así que para resumir, esta es todo lo contrario que aquella, je, je, je.
      Como bien dices, una novela no tiene la escapatoria de una banda sonora, una fotografía o la presencia de un actor o actriz determinado. Es solo el autor y su escritura. A veces, cuando no hay historia, se nota mucho. Los capítulos se inician con descripciones o divagaciones eternas, como si se intentara disimular con ello que en realidad no pasa nada mientras lees. Por ello prefiero a los autores que no se ciñen a la realidad y apuestan por una historia inverosímil, pero entretenida. Un abrazo!!

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  7. Interesante propuesta. De un tiempo a esta parte suelo ver bastantes vídeos sobre la sociedad japonesa, curiosos e inquietantes para un occidental mediterráneo y pedestre, y sí, sí que debe de haber una tarantinosfera nipona por descubrir, atrapada entre alguna de sus facetas y aristas. En su día era un fan de Takeshi Kitano o del cine coreano de los dos mil, ese tan rompedor, que veías en los cines de versión original o la filmoteca, así que algo llama. Seguro que algún parentesco popespírico encontramos en las novelas de Kotaro Isaka. Los perfiles de los tres personajes prometen mucho pero mucho. En todo microcosmos cuecen habas con sushi. Gracias por la reseña.

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    1. Gracias, Fernando. Reconozco que cada vez más me está enganchando la ficción oriental, la veo como menos encorsetada en los parámetros de lo políticamente correcto. Y eso abre mucho las posibilidades de sorpresa y originalidad de las historias. Humor negro, escenas gamberras, personajes viciosos y por tanto reales. Esperemos que la tontada woke no llegue por aquellos lares. Un abrazo!

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  8. Hola, David.
    Si a ti no te gusta la novela negra de este siglo, a mí, además, no me gustan los autores japoneses, así que podría pensarse que con esta novela lo tengo claro. Sin embargo, tu reseña atrapa y los insertos que has colocado del texto son buenísimos (lo de la explotación laboral del sicario es de traca), así que me he venido arriba y voy a leer novela negra de este siglo y escrita por un japonés. ¡Estoy mu loca!
    Un abrazo.

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    1. Gracias, Paloma. Es una novela diferente a lo que se publica normalmente y eso a mí me supone un plus. Cuando hablo de la novela negra de este siglo me refiero a la más convencional, la que suele aparecer en los primeros puestos de venta. Esa fórmula de thriller reconozco que funciona, pero es que leo una y me parece la misma que leí la semana pasada, es como si en lugar de leer a un autor leyera una fórmula con cuatro o cinco variantes argumentales, pero sin nada que me la haga única. Esto sí me sucede con las del siglo pasado.
      Esta tiene voz propia y un estilo reconocible, luego están los gustos de cada uno, claro. Un abrazo!!

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  9. Muy intesante propuesta de lectura, porque, como dices, si una novela te atrapa, poco importa lo verosímil que sea.

    Un fuerte abrazo, David y gracias seimpre por tus posts tan currados.

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    1. Gracias, Maripau. Como dicen hay tantos gustos como culos, ja, ja, ja... Esta desde luego encajó en los míos. Un abrazo!

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  10. Suena muy tarantiano todo, muy trepidante y molón. Personalmente flipé con la películo del Tren Bala, me lo pasé pipa. No sabía que estaba basada en este autor que nos traes y que parece construir con verdadera originalidad sus mundos. Lo buscaré en mi próximo paseo por la biblioteca del pueblo, a mí también me gusta perderme por sus estanterías.

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    1. Gracias, Matilde. Pues esta es la precuela de aquella. De hecho, el final de esta enlaza con el inicio de Bullet Train, al menos con el inicio de la novela. La verdad es que esa película me pareció entretenidísima. Esta novela no tiene la acción trepidante de esa película, pero sí esa sensación de mundo paralelo donde puede ocurrir cualquier cosa sin que parezca irrazonable. Un abrazo!

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  11. Hola David, a mi me gusta Tarantino, de literatura japonesa he de confesar que voy algo perdida, he leído algún cuento o leyenda pero nunca es tarde si la dicha es buena, gracias por compartir, me gusta descubrir lo desconocido para mí, muy buena entrada y muy completa.
    Un abrazo!

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    1. Gracias, Dakota. Pues yo estoy empezando a descubrir la novela negra japonesa y, de momento, me da la sensación de novedad y frescura en el género. Un abrazo!

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  12. Hola, David.
    Es que Tarantino, son palabras mayores, vaya sí los son.
    Para que a mi me enganche una novela sea cual sea su género, tiene que tener una parte humana muy real, tengo de alguna manera encontrarle la escena en la que pueda ponerme en su lugar, sea bueno o malo, quizás soy algo rarita, pero es que de verdad que sino está esa parte en la que me adentra la historia, la comprendo, no consigo introducirme del todo en ella.
    Los personajes deben tener vida, con sus chapuzas o genialidades, porque a veces lo que menos sentido tiene en momentos de presión o locura son los más veraces.
    Y la construcción de un personaje que lo puedes visionar excesivo, como con muchos de Tarantino, si los analizas ves todas esas posibilidades como algo creíble.
    Genial entrada. Me apunto a Kotaro Isaka.
    Un abrazo, feliz fin de semana.

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    1. Gracias, Irene. Es que si todo lo que has comentado, la lectura resulta plana y ello lleva al aburrimiento y a dejar el libro a la mitad o terminarlo por inercia. Leer tiene que absorberte y para lograrlo debes identificarte con una situación, reacción o personaje. El autor que logra que el lector se ponga en el lugar del personaje es el que ha logrado el objetivo.
      Tarantino es un maestro de la Narrativa. Sus personajes son extremos y diría que un punto inverosímil si lo piensas, pero logra humanizarlos dándoles virtudes y defectos, flaquezas y fortalezas. Todo villano con una debilidad siempre empatiza con el lector. Un abrazo!

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  13. Sí un autor escribe bien, y encima te sorprende, ya me ha ganado.
    Qué estupenda reseña... Para colmo, los textos extraídos confirman tus elogios, se capta ese humor fino y esa elegancia en los diálogos...
    Cuánta falta le hace al cine los buenos diálogos, pero aún más a la novela, donde no hay distracción visual ni musical, es puro arte narrativo.
    Me lo apunto, a mí lista... Y la película de Brad Pitt
    Un abrazo!

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    1. Gracias, Maite. Precísamente los buenos diálogos es lo que más hecho en falta en las novelas actuales, al menos las más comerciales. Por lo general me resultan obvios, planos y casi diría que muy por debajo de la supuesta edad del personaje. Esto es algo que en la novela negra clásica se cuidaba muchísimo. También en las películas. Comparar un diálogo de Tarantino con el 90% de las películas de hoy es para echarse a llorar. El subtexto es esencial. Y la chispa, por supuesto. Bullet Train es muy entretenida. Un abrazo!

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  14. Hola, David!
    Pues me has despertado la curiosidad, sobre todo por esa combinación de Tarantino, novela negra y Japón. He visto Bullet Train, aunque rocambolesca me gustó. Es una película de personajes, hay algunos muy bien construidos que dan una dimensión extra a la película, y esta novela que nos traes parece que sigue la misma fórmula. Además del ritmo frenético junto con la historia coral, algo que siempre es un plus. Muchas gracias por compartirla, me la apunto.
    Un abrazo!

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  15. ¡Vaya David! Leyendo tu entrada dan ganas de leerla, en serio, y no soy tan fan del género. Gracias por tanta y tan buena información sobre Tres Asesinos y su autor. Definitivamente has picado mi curiosidad, veré si la encuentro. Saludos.

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